El testamento cerrado notarial, es un testamento en el que el testador declara su voluntad en secreto y no se revela hasta que se abre el testamento. Su origen y justificación radica en que, antiguamente, los testamentos notariales requerían la presencia de un testigo (una excepción hoy en día).
Así que había una alternativa, como veremos, para asegurar que en el improbable caso de que los testigos actuaran precipitadamente, no conocieran la voluntad del testador. Sin embargo, hoy en día conllevan muchos riesgos y ya no son útiles. En este artículo testamenta.es te muestra en qué consiste y por qué este testamento se muestra como una figura casi extinguida.
¿Qué es el testamento cerrado notarial?
Es un testamento en el que el testador no revela su voluntad al notario, sino que presenta una declaración de que su voluntad está escrita en una hoja de papel, que introduce en un sobre y sella, para que siga siendo confidencial.
Su formación puede resumirse en cuatro etapas básicas, basadas en el Código Civil español que resumimos a continuación:
Fase de preparación
El testamento cerrado debe redactarse de puño y letra del testador, en cuyo caso este debe firmar al final, o de forma mecánica o por otra persona a petición del testador, en cuyo caso debe firmar todas las páginas. Si el testador no puede o no quiere firmar, la parte inferior y todas las páginas serán firmadas por otra persona a petición del testador, indicando el motivo.
Todas las tachaduras, correcciones y palabras escritas entre líneas deben conservarse. De este modo, se espera que el autor sea lo más genuino posible y que el contenido sea claro.
Requisitos para testamento notarial
Etapa de otorgamiento
En la carátula, el notario levantará el acta de ejecución correspondiente, hará constar el número y el sello de la misma, y certifica que el testador conoce o ha sido debidamente identificado. Una vez redactada y leída el acta, será firmada por el testador y, en su caso, por los testigos que hayan asistido al acto, y en ella se hará constar el lugar, el día y la hora, y será autentifica por un notario.
Una vez autorizado el testamento, el notario colocará una copia certificada del acta de ejecución en el protocolo vigente y luego la entregará al testador. De este modo, el notario confirma que la persona ha hecho un testamento. Sin embargo, se alega que el notario solo presenta la escritura a realizar en la cubierta, pero no el contenido del testamento.
Qué es el testamento notarial cerrado
Etapa de sucesión
Tras el fallecimiento del testador, la persona en posesión del testamento cerrado (si no lo tenía el notario) debe presentarlo al notario en el plazo de 10 días desde que tuvo conocimiento del fallecimiento del testador.
En el mismo plazo, el notario debe informar de la existencia del testamento al cónyuge supérstite, a los descendientes y a los ascendientes del testador.
Si no se conocen las direcciones o las identidades de estas personas, el notario las publicará de acuerdo con los estatutos notariales. La persona que no la presente de forma fraudulenta perderá todos los derechos relativos a la herencia. Lo mismo se aplicará, sin perjuicio de la responsabilidad penal que pueda corresponder, a quien lo sustraiga indebidamente del lugar de residencia del testador o de la persona que lo tenga bajo su custodia.
Ventajas del testamento notarial
Debilidades del testamento cerrado
Un testamento cerrado notarial revela sus debilidades, como las que se desglosan a continuación:
Dado que el notario está obligado a guardar el secreto del protocolo (que es sagrado en la vida de un notario) y no revela la voluntad del testador tal y como se recoge en el testamento, no hay ningún beneficio adicional en que el notario no conozca el contenido del testamento. La indiscreción es inaceptable
Un testamento cerrado se hace en presencia de testigos. Esto significa que nadie puede conocer el contenido del testamento, pero sí sabrán que se ha hecho. Sin embargo, esta desventaja no suele ser relevante
Sin embargo, hay una desventaja más grave, y ya está prevista. Al ser el propio testador quien redacta el documento, se pueden cometer errores en su redacción sin la ayuda adecuada
Algunos errores pueden ser ilícitos, en cuyo caso se impugnará el contenido del testamento. Si se impugnan estos documentos, se aplicarán las normas de la sucesión intestada y el destino del patrimonio del fallecido quedará al margen del testamento
Por último, si la escritura no se deja en manos del notario, puede perderse, ocultarse o destruirse. Este es el principal inconveniente de los testamentos ológrafos y también ocurre con los testamentos cerrados.
En resumen, estos testamentos combinan la mayoría de las desventajas de los testamentos ológrafos, con la desventaja añadida de que son caros de ejecutar, abrir, notarizar y registrar. Por ello, actualmente son una de las menos utilizadas.
Qué es el testamento notarial abierto
Todo sobre testamentos, herencias y sucesiones
Sin embargo, si estás interesado en adquirir asesoramiento personal sobre el testamento cerrado, puedes visitar Testamenta, siempre es recomendable hacer el testamento a tiempo, ya que de esta manera quedará claro que los bienes pasarán a las personas que queremos y facilitará todos los trámites de los herederos en el futuro.
Si lo deseas, estamos siempre disponibles para discutir tus necesidades. La principal ventaja de suscribirte a nuestro servicio es que todo se puede gestionar en línea, por lo que no tienes que desplazarte en persona. Podemos ayudarte de igual manera con testamentos notariales, testamentos vitales, testamentos conjuntos, testamentos libres y testamentos express.
La entrada El testamento cerrado notarial: una figura que casi no se utiliza se publicó primero en Testamenta blog.